Un Teatro para Carlos Olmos

David Tovilla
Fotografía del libro Teatro completo de Carlos Olmos
Por segundo año consecutivo, recordamos el olvido en que se encuentra el mayor dramaturgo chiapaneco: Carlos Olmos. El 13 de octubre, se cumplen doce años de su fallecimiento.

La desconsideración para su obra es generalizada. Durante el mes pasado, se habló por doquier de los treinta años del terremoto de la Ciudad de México, en 1985. En el suplemento especial del periódico Excelsior, se da voz a Ignacio Padilla quien dice “Hubo y sigue habiendo muy poca literatura en este orden. Paz, Pacheco y Monsiváis hicieron literatura sobre el terremoto, y quizá algunos otros autores lo mencionan liminarmente. Pero el registro literario del terremoto sigue brillando por su ausencia”. Pues Carlos Olmos es de quienes se ocupó en específico de ese suceso. Su último trabajo se llama “Después del terremoto”. Se incluye en el volumen “Teatro completo” publicado por el Fondo de Cultura Económica. Además, se llevó a escena el 19 de septiembre de 2002, en el Teatro El Galeón del Instituto Nacional de Bellas Artes, justo en el marco del decimoséptimo aniversario de la tragedia. La participación estelar estuvo asignada a Delia Casanova, a quien está dedicada la obra. Ahí están los registros para quien quiera enterarse. Ahora, en 2015, la farsa en un acto que remite a dos personas atrapadas por los escombros del sismo del ochenta y cinco, debiera estar presente. Pero, por desgracia, todo en torno a Carlos Olmos es omisión, ninguneo, como en la nota periodística comentada.

Por eso, porque los años quieren enterrar también su trabajo, en días pasados, presenté un proyecto al nuevo gobierno del municipio de Tapachula, lugar natal del dramaturgo, para iniciar la reivindicación de su nombre y legado. Así como Comitán despliega orgullosa su identidad con Rosario Castellanos, la perla del Soconusco debiera recuperar la figura de Carlos Olmos para ostentarla, con presunción, como parte de su grandeza. Estas son las acciones planteadas:

1. Teatro de la Ciudad “Carlos Olmos”. De acuerdo con la ficha del Sistema de Información Cultural del gobierno mexicano, el Teatro de la Ciudad de Tapachula sólo tiene esa denominación. Bien podría llamarse Carlos Olmos.

2. Día del dramaturgo Carlos Olmos. En la actualidad, hay días dedicados hasta a las banalidades. No lo es declarar el 8 de diciembre de todos los años como “Día del Dramaturgo Carlos Olmos”. Celebrar su nacimiento más que la fecha de su deceso.

3. Certamen de teatro Carlos Olmos. Instaurar un certamen anual que subraye el carácter de literato del escritor fallecido. Dirigido a estudiantes de educación media y superior que consista en la puesta en escena de sus obras.

4. Generar identidad de Tapachula con el escritor. En materiales de difusión masiva como los recibos de agua potable incorporar la leyenda “Tapachula, cuna de Carlos Olmos”, en alusión a su trabajo más conocido: “Cuna de lobos”. En los accesos de la ciudad colocar grandes anuncios que digan “Bienvenido a la tierra de Carlos Olmos”.

5. Difundir genio y obra. Elaborar materiales atractivos y de ágil lectura con información esencial de Carlos Olmos, para distribuirlo en la población general y en escuelas de educación media y superior del municipio.

6. Fundación Carlos Olmos. Valorar la viabilidad de instaurar una fundación para darle consistencia y formalidad a las actividades realizadas en nombre de Carlos Olmos. Su misión sería difundir la obra del dramaturgo tapachulteco, promover la investigación acerca de su trabajo literario y fomentar la cultura en general.

7. Acervo Carlos Olmos. Habilitar un espacio interactivo y moderno en el que, de manera permanente, la población en general, en Tapachula, tenga acceso a la exhibición, consumo y adquisición de materiales como fotografías, libros, telenovelas.

8. Cátedra Extraordinaria Carlos Olmos. En coordinación con una universidad pública, crear la Cátedra Extraordinaria Carlos Olmos, con sede en Tapachula, para la promoción de la enseñanza y el estudio de la literatura por parte de especialistas nacionales y extranjeros con el fin de que acudan a Tapachula. En ese marco, se convocaría a estudiosos de la obra de Olmos para incluirlos como conferencistas.

9. Stand en la Feria de Tapachula. Garantizar que todos los años, en la tradicional Feria de Tapachula, se instale un stand relativo a Carlos Olmos para que su difusión se coloque en un evento masivo.

10. Museo Virtual Carlos Olmos. Aprovechar los recursos de la revolución tecnológica para hacer una difusión innovadora de la obra y las actividades relacionadas con el dramaturgo chiapaneco.

11. Coedición popular de sus obras. Las obras de Carlos Olmos están publicadas en un solo volumen editado por el Fondo de Cultura Económica. Podría hacerse un trabajo en coedición con dicha institución para editar pequeños libros individuales a precios económicos, accesibles.

Son ideas, para quienes tienen la infraestructura, los recursos, la representación institucional para detener el olvido. Quizá haya mejores propuestas, lo importante sería que se hicieran…